por Conchita Delgado Escribano

• Área de Cultura: Paulino García de Andrés
  
• Área Institucional: José Antonio Pastor Ridruejo
  
• Área de Entidades Culturales y Sociales: Colegio del Sagrado Corazón de Soria
  
• Área de Empresas: Patatas Añavieja - Soria
  
• Área de Turismo: Hotel Río Ucero del Burgo de Osma
  
• Área de Deportes : Aitxiber Yagüe Cortaza
  
• Área de Comunicación: Cadena SER - Soria
  
• Área de municipios: Trévago
  
• Sorianos con mención de honor: Domingo Heras (recientemente fallecido), Ricardo López García Y Simón Reyes Martínez Córdoba
  
  Cuando se entregó el premio de Trévago se levantó a recibirlo Antonio Alonso Gómez, nuestro alcalde, acompañado de un gran aplauso -con puesta en pie- de los trebagüeses que, entre otros, llenábamos la sala, corroborado por los demás asistentes, casi 500, que pensaron ¡Qué grande debe ser Trévago y no lo conocíamos! ¿Dónde estará?
  
  La presencia de los trebagüeses se nota, hasta el punto de que el presentador, extrañado, pregunta ¿pero cuántos de Trévago hay aquí? ¡Que levanten la mano!... Y somos 40 los que estamos allí animando a nuestro representante y aplaudiendo a rabiar, contagiando a todos los asistentes.
  
  El pueblo de Cabrejas del Pinar nos felicita cariñosamente, recordando que les hemos arrebatado el premio por un voto. Seguro que en próximas ediciones os acompañamos a recoger ese premio de los Sorianos del Año, que vosotros también merecéis.
  
  Nuestro alcalde recoge el diploma acreditativo de manos de S.A.R. Doña Margarita de Borbón y el Excmo. Sr. D. Carlos Zurita, Duques de Soria y Presidentes de Honor de la Casa de Soria en Madrid, y pronuncia las siguientes palabras:
  
  Alteza real, excelentísimo señor, dignísimas autoridades, señoras y señores:
  
  Las primeras palabras de este alcalde de pueblo que habla, como no podía ser de otra forma, en nombre y desde el corazón de todos los trebagüeses, deben ser de agradecimiento por el premio quizás más prestigioso que puede recibir una entidad local de nuestra querida Soria. Y junto al agradecimiento, el orgullo.
  
  Nuestro pueblo, Trévago, es expresión de lo que don Antonio Machado denominaba: "barbacana hacia Aragón en castellana tierra"... en el llano que se extiende bajo el Moncayo, Trévago se acuna también bajo la Sierra del Madero. Y nos parece a los que allí nacimos o vivimos que nuestro pueblo es muy hermoso. Ya sé que lo mismo deben pensar todos o casi todos.
  
  Nosotros, los trevagüeses, estamos enamorados de la iglesia y el torreón, que ya alimentaban leyendas en el siglo once, de la ermita, de Valmayor, de la fuente, del camino del río, del Juncar, de la Peña el Mirón, de las calles y de nuestras casas que hemos trabajado para mejorar... No les voy a cansar: ¡nos gusta nuestro pueblo! Pero les voy a decir que mucho más, si es posible, estamos, estoy, orgulloso del corazón de nuestras gentes. El mismo que ha permitido que Trévago vuelva a renacer, después de décadas de marchar cuesta abajo. Los que van a Trévago fines de semana y vacaciones y, sobre todo, los que viven allí siempre, han demostrado esa grandeza de corazón porque no se han resignado a dejar morir esa patria irrenunciable que es el pueblo que les vio nacer, crecer, vivir... sentir.
  
  Por ello hemos apostado por el turismo rural. Contamos con 40 plazas de alojamiento, en cuatro casas rurales, -dos de gestión municipal y dos privadas-, y por el medio ambiente. En breve abordaremos el proyecto de la construcción de un eco-museo y centro de interpretación de canteras molineras, que si bien hoy en desuso, contó de gran importancia en siglos pasados.
  
  La proyección de Trévago a través de Internet tiene una gran importancia, gracias al trabajo de la Asociación Amigos de Trébago y a su presidente.
  
  En fin, y para terminar, junto al agradecimiento y el orgullo, -¡qué conceptos tan sorianos!-, el compromiso. Premios como éste son un acicate más para seguir mejorando un pueblo para nosotros, los trebagüeses, y para todos los que quieran visitarnos. Como les decía, aún en estos tiempos de crisis, en nuestras casas, en nuestra tierras y sobre todo, en nuestro corazón, hay sitio... porque, y eso lo sabemos bien los sorianos, lo importante es querer... y Trévago, en nombre de todos sus ciudadanos me comprometo, va a seguir queriendo.
  
  Por un día, los trevagüeses nos sentimos importantes. Hay que reconocer que el premio nos tocó el corazón y afloraron en nosotros sentimientos de unión y agradecimiento a la Casa de Soria en Madrid, que nos hizo sentir importantes y nos dio un gran impulso para seguir luchando y proponiendo nuevos proyectos para nuestro pueblo.
  
  El hijo de Domingo Heras, acompañado de su madre, recibe un premio especial de reconocimiento a la labor como Presidente de la Diputación y por su destacada colaboración a la provincia de Soria. Un emotivo aplauso pone la carne de gallina a los asistentes, que tratan de transmitir su cariño a Adoración Elvira, esposa de Domingo, y a su hijo.
  
  Después de la entrega de premios hay una comida de hermandad para los premiados. En la mesa del grupo de Trébago está también Javier Narbaiza, trebagüés de adopción, al que debemos y agradecemos su empeño en proponernos para este premio. Llegan los cafés y los intercambios de saludos y reconocimientos. Por las distintas mesas hacemos campaña de nuestro pueblo, de las casas rurales, y saciamos la curiosidad de muchos que nos preguntan ¿dónde está Trébago? ¿Cuántos habitantes tiene? ¿Se escribe con b o con v? Fueron buenos momentos para conocernos un poco mejor, para contar a más de uno dónde está nuestro pueblo, cuánta gente vive, cómo son nuestras casas rurales, nuestros proyectos y, por supuesto, invitarles a todos a entrar en nuestra página www.trebago.com y a venir y comprobar que sí, que aquí hay duende y que este premio y el cariño que recibimos de parte de todos son una buena inyección que acrecienta nuestra ganas de trabajar y plantear nuevos retos, tanto para nuestro pueblo como para la Rinconada y la provincia, con la seguridad de que, con la ayuda de todos, seguiremos haciendo una Soria... que ni te la imaginas.
  
  Por la tarde, el autobús devuelve a Trébago a los que desde allí acudieron al acto, y a las once y media de la noche estaba ya cada mochuelo en su olivo, después de un viaje en el que el tema de conversación prioritario fue, como no podía ser menos, el agradecimiento por el premio y el entusiasmo que todos los asistentes habíamos puesto en el acto. Y -¡Cómo no!- lo que este premio implica de compromiso para Trébago para seguir trabajando.
  
  Enhorabuena, trebagüeses, al igual que a todos los premiados, en especial a los de La Rinconada, Simón Reyes Martínez Córdoba (de Fuentestrún) y Patatas Añavieja (de Añavieja), y gracias a la Casa de Soria en Madrid por este premio que nos ha concedido.
  
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