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por José Lázaro Carrascosa
Vicepresidente de la Asociación de AMIGOS DE TRÉBAGO
Tomando el hilo del artículo anterior, y como prometimos, les queremos relatar lo que fue la inauguración oficial de las escuelas de Trébago el Domingo 19 de mayo de 1.929.
Previamente invitados por el Ayuntamiento del pueblo, y confirmada su asistencia, hicieron acto de presencia en Trébago las autoridades provinciales (sobre las cinco de la tarde aproximadamente, de aquel radiante día de mayo); fueron éstos el Sr. Gobernador Civil acompañado de su señora esposa; vicepresidente de la Diputación, D. Rafael Arjona; Comandante auxiliar de los somatenes, Sr. Sánchez Néira; Inspectora de primera Enseñanza, Srta. María Cruz Gil Febrel e Inspector jefe D. Gervasio Manrique; también formaban parte de la comitiva D. Felipe las Heras, Director de El Avisador Numantino, periodistas Obregón y Sanz y varias personalidades más.
Para esta hora, ya habían llegado a la cita los invitados de los pueblos limítrofes, de Valdelagua, Fuentestrún, Castilruiz y Matalebreras; de todos ellos asistieron los alcaldes, secretarios, maestros, sacerdotes y cantidad de gente que no quiso perderse la novedad del acontecimiento; también hubo presentes en los actos personalidades de Olvega, Agreda y Madrid; ¡(fue un acontecimiento multitudinario)!.
Para recibir a las autoridades se encontraban a la cabeza del nutrido gentío el Ayuntamiento en pleno de Trébago, funcionarios del mismo y representantes de los donantes de la obra.
Hecho el recibimiento de rigor se dirigió la comitiva al amplio salón-escuela, donde una artística rondalla formada por los mozos del pueblo, dio la bienvenida a las autoridades e invitados, ejecutando bonitas composiciones; los niños y las niñas recitaron bellas poesías y ofrecieron ramos de flores a las damas, Srta. Mª Cruz Gil Febrel y Sra. Marquesa de Vista Alegre, esposa del Sr. Gobernador.
Un fuerte y caluroso aplauso por parte del público en general rubricó esta primera parte del acto. En aquel momento el pueblo se recreó en el triunfo y, en una explosión de generosidad, olvidó sacrificios y trabajos y degustó las mieles del reconocimiento público de autoridades, tanto culturales como políticas, y de todos los acompañantes; para todos ellos tuvo Trébago un ejemplar y cortés recibimiento, un saber estar y unas atenciones y deferencias singulares, de cuyo comportamiento se hicieron eco todos los oradores que tomaran la palabra y que fueron estos por orden de intervención:
El primero fue D. Manuel Barrero, secretario del Ayuntamiento, quien, después de saludar a las autoridades y público en general, hizo mención a los donantes resaltando el sacrificio que el pueblo se impuso para llevar a cabo la obra.
Seguido, el Sr. maestro D. Manuel Betrián, tras de corto y "bordado" saludo para todos, explica las dificultades que surgieron para crear las nuevas escuelas y dio las gracias a los donantes y al pueblo de Trébago por su cooperación y por haber creado viviendas para los profesores. Termina solicitando de las autoridades 20 mesas para las nuevas escuelas, por no ser suficientes las disponibles.
El Sr. cura párroco, D. Jaime Miñana, con breves palabras saludó a las autoridades y visitantes en general, felicitando al vecindario de Trébago y a los Sres. donantes, y concluye recomendando se dé a los niños una enseñanza completa, unida a una educación cristiana.
Los periodistas Obregón y Sanz tocan el tema principal de pasada y centran sus discursos en elogiar a "la excelentísima marquesa de Vista Alegre y al digno Sr. Gobernado". El Sr. Sanz manifiesta que el vecindario de Trébago y las autoridades deben unirse a la petición hecha por Langa de Duero para que le sea otorgada una distinción honorífica a la Sr. Marquesa de Vista Alegre por su labor en pro de los necesitados.
D. Felipe las Heras pronuncia un extenso discurso del que extractamos substancialmente lo siguiente: "los sorianos nos hemos distinguido, antes, por nuestra sobriedad, pero ahora nos revelamos como verdaderos patriotas y amantes de la cultura; queremos que Soria, por sus escuelas y por sus maestros, sea de las primeras de España".
Dedica grandes elogios a D. Mariano de Lázaro "que después de luchar como tantos hijos de esta tierra, obtiene la victoria y favorece a sus paisanos creando una escuela. Sus hermanos, al llevar a efecto la obra, desean también igualarle y prestan su valiosa y decisiva cooperación. Este es el mayor beneficio que puede haber hecho el Sr. Lázaro a su pueblo y éste a su vez el mejor acto de agradecimiento con que podían corresponderle sus hermanos. Habéis dado un ejemplo, honrados labradores de Trébago, que honra a vuestro pueblo, a vuestra provincia y a España".
El Inspector Sr. Manrique, dirige breves frases felicitando a las autoridades y vecinos de Trébago por el ejemplo que acaban de dar construyendo un moderno edificio escolar y casas para los profesores; lamenta que el donante de las escuelas no pueda hallarse en el acto y termina dedicando un cortés saludo a la Sra. Marquesa y a la Inspectora Srta. Gil.
El Sr. Arjona, en nombre de la Diputación, saluda a los concurrentes y dice que ésta acoge la idea de Langa de Duero de otorgar un homenaje a la Sra. Marquesa; felicita al Sr. Gobernador Civil y al alcalde de Trébago, y termina ofreciendo el material escolar solicitado por el Sr. maestro.
Don Tomás Tutor pronuncia unas sentidas palabras y da las gracias por su asistencia a autoridades y a toda la concurrencia en nombre de los donantes.
El Sr. Gobernador resume el acto con elocuentes frases, saluda a cuantas personas honran con su presencia tan patriótico acto, y da las gracias al Sr. Alcalde de Trébago y vecindario por el entusiasta recibimiento que se le ha tributado. Añade que el Gobierno que preside el General Primo de Ribera se preocupa mucho de la enseñanza, habiendo creado desde su advenimiento al poder más de siete mil escuelas. Felicita a los donantes y vecindario nuevamente y termina manifestando que asiste a estos actos con agrado, porque son actos de cultura y progreso.
Todos los oradores fueron muy aplaudidos. Seguidamente, autoridades e invitados visitaron las nuevas viviendas construidas por el pueblo para los Sres. maestros, para regresar por último al nuevo centro escolar, donde fueron obsequiados con un espléndido lunch servido por las bellas y simpáticas jóvenes Teresa Martínez, Gregoria Ruiz, Visitación Martínez y Basilia Córdoba.
El periódico El Avisador Numantino, donde se publicó el reportaje del que nos hemos servido para elaborar este artículo, lleva fecha de miércoles 22 de Mayo de 1.929, y lo firma FRANCISCO SORIA.
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