Trébago celebró las VII Jornadas Micológicas

Trébago, 06/11/2017. El sábado 4 de noviembre de 2017, en Trébago, se celebraron las VII Jornadas Micológicas. Como ya sabíamos que no había setas, sustituimos esa parte de la actividad por la de hacer una excursión hasta “La piedra de los tres obispos”. Así, en 5 ó 6 coches, nos fuimos los marchosos desafiantes al temor de la lluvia hasta la entrada por la carretera de El Espino cerca de La laguna del carro, y de allí, dando un paseo, hasta dicha piedra, que está a la orilla del pinar junto al camino de Valdegeña. El presidente de la Asociación explicó a los asistentes el significado de dicha piedra, tanto en el aspecto religioso como geográfico, tomando la información que aparece en la revista 25 de La Voz de Trébago, de cuyo artículo es autor. En lo geográfico, la piedra tiene una función mojonera. Tiene marcada una cruz, y en las cuatro partes en que queda dividida la piedra aparecen cuatro letras: T de Trébago. M de Magaña. E de El Espino. V de Valdegeña. En lo religioso, según cuenta la tradición, a su alrededor podían juntarse los tres obispos de las tres Diócesis a las que pertenecían los pueblos antes citados, y cada uno estaba en la suya, ya que Trébago pertenecía al Obispado de Tarazona, Valdegeña y El Espino al Obispado de Osma y Magaña al Obispado de Calahorra. Junto a la Piedra de los tres obispos hay otra piedra natural en la que nuestro querido José Carrascosa (Pepe), cantero aficionado, dejó una inscripción con el nombre de la piedra indicada, dentro de una serie de 100 inscripciones con los topónimos de Trébago que dejó repartidas por todo el término. El artículo completo puede verse en la Revista 25, en el enlace: http://trebago.com/revistas/25/06piedra.asp De allí hemos tomado tres de las fotografías que aquí aparecen. En esa misma revista aparece otro artículo titulado 50º Aniversario de la demarcación de la Diócesis de Osma-Soria, escrito por Alfonso García Bermejo - Cura Párroco, al que se accede en el enlace: http://trebago.com/revistas/25/05aniversario.asp Al final del paseo empezó a llover, que le viene bien al campo, pero la cantidad fue muy escasa y con ello no se apaga la sed. No vimos setas, pero sí una bandada de grullas volando en forma de V, que llamó la atención de varios de los excursionistas. Después tuvo lugar la comida popular tradicional, con un menú a base de garbanzos con boletus –extraordinario–, unas carrilleras al vino tinto –de sobresaliente– y helado de postre, con café y chupito. Por la tarde, a las 17’30, en el salón del Centro de Información de Canteras Molineras, charla explicativa y degustación de pasteles a cargo de la pastelería Los Tres Chocolates, de Ágreda, donde Carlos Lavilla nos explicó que se puede hacer repostería de lo que quieras. Hace falta tener ilusión, iniciativa y voluntad de hacer cosas distintas de las “normales”. Nos explicó, y nos trajo ya preparados, bandejas con cuatro tipos diferentes de pasteles: 1.- Boletus confitado con crujiente de praline de almendra marcona. 2.- Cremoso de trompeta. 3.- Rebozuelo. 4.- Pastel de cardo rojo. Preguntado por lo más extraño que había hecho en pastelería, nos comentó que entre las cosas que se salen de lo común está una tarta de alubias (incluso de alubias con chorizo), o un chocolate de violetas. Una charla amena y entretenida, acompañada de varias bandejas que, después de la comida popular (pagada a escote) que habíamos tenido, supuso que sobrara mercancía, que se llevó a La Escuela para terminarla en La noche trevática. Y es que, por la noche, a las 12, se celebró “la noche trevática”, baile y disfraces en Las Escuelas que sirvieron para que muchos se murieran... de risa. En total, un día completo, aunque no hubiera setas en el monte.