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por Juan Palomero Martínez
Presidente de la Asociación de AMIGOS DE TRÉBAGO
Presentamos a los lectores la última revista del milenio de LA VOZ DE TREBAGO. La Asociación de AMIGOS DE TREBAGO se constituyó legalmente el 30 de agosto de 1994. Desde entonces se ha acercado a sus socios y simpatizantes puntualmente en julio y diciembre de cada año, siendo ésta la revista número 11 que publicamos.
Desde 1994 hasta aquí se han ido consiguiendo metas, muchas en colaboración con el Ayuntamiento, y todas ellas importantes. Pero sin duda, quizás la más importante para Trébago ha sido la recuperación por parte del Ayuntamiento del antiguo edificio de las Escuelas para Salón Social y la cesión del uso de una parte del mismo para la Sede de la Asociación, lo que se ha hecho en 1999.
Además, y gracias también a la ayuda de CIT ÓLVEGA en colaboración con Levi Strauss de España, en su Planta de Producción de Ólvega (Soria), se ha equipado el Salón Social con Televisor y vídeo, y la Sede de la Asociación con equipo informático y otro mobiliario.
Desde aquí quiero agradecer a todos su inestimable colaboración. Pero me gustaría que no nos quedáramos sólo en lo puramente material. Aún siendo importante, también son importantes otros aspectos de la vida. Ese rato juntos echando la partida, ese ayudar al vecino cuando lo necesita, esa colaboración enviando trabajos para la revista, preparar juntos las fiestas, organizar actividades. Se pueden hacer tantas cosas... Sólo hace falta que cada uno no se encierre en sí mismo y se dé cuenta de que existen otras personas a su alrededor.
Recuerdo muchas veces que me decía el "tío Félix" (D. Félix Lázaro) que el hombre estaba hecho para vivir en sociedad. ¡Cómo habría disfrutado viendo las Escuelas hoy, lugar de reunión de hombres y mujeres! Porque en eso, hay que reconocerlo, Trébago ha mejorado mucho. Ya no es sólo los hombres al bar y las mujeres en casa. Desde que funciona el Salón Social Las Escuelas, hombres y mujeres de todas las edades se reúnen allí habitualmente, lo que da un ambiente de amistad y hermandad mucho mayor.
En fin, que se acaba el año 1999, y dicen que se acaba el milenio. ¿A ver si va a resultar que, después de tanto bombo y platillo, el milenio no se acaba hasta dentro de un año? Unos dicen que no hubo año cero, que siempre se empieza por uno. Otros dicen que si no hubiera habido año cero, se pasaría del -1 (un año antes de Cristo) al +1 (primer año de la era cristiana), dejando un hueco en el intermedio.
Sea como sea, nos alegra finalizar el año 1999 de la forma en la que lo hemos hecho, y desde aquí, en mi propio nombre y en el de la Asociación de Amigos de Trébago, deseamos a todos los lectores una Feliz Navidad, un próspero Año Nuevo 2000 y lo mejor para el milenio nuevo, hasta donde alcancemos a verlo y vivirlo. Felicidades a todos.
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